Odio a Camela
En el bloque de pisos donde yo vivo hay dos escaleras; dieciséis familias por escalera. Tenemos varias familias de chinos, una de musulmanes y en la portería se hacinan tres parejas de sudamericanos. Bien, la familia de musulmanes son en total ocho personas y no se les oye, sólo al bebé pero es normal. A los chinos sólo se oye a la madre pegarle bronca a los hijos y es muy divertido oír la bulla en su idioma. Y a los sudamericanos sólo se les nota por el olorcillo tan rico a especias que sale de su casa.
¿Y quien es la que hace más ruido de todo el bloque, al menos por mi lado? Mi querida vecina. Madre soltera de dos hijos, niño y niña, de corta edad. Cada día tiene que poner los puñeteros Camela a todo volumen. Yo no sé qué tiene ese grupo pero desde luego nunca ha sido mi estilo ni lo será. Os juro que cuando a eso de la una del mediodía se oye en toda la escalera la musiquita de marras (imaginaos cómo se oirá en el piso de al lado, es decir, el mío) me entran ganas de coger el Home Cinema que tiene mi marido instalado en otra habitación, montarlo en el comedor y ponerle música house con el suficiente volumen para que se hunda el bloque.
Pero claro, luego piensas que no vas a ser tan cría como ella... y te contentas con montar un pollo con tu hijo pequeño: tú con una cacerola y una cuchara de madera armando escándalo y el peque con dos tapas de sartenes a modo de platillos. Mi pobre marido se viene derechito al ordenador y ahí se queda hasta que acaba la fiesta.
Lo curioso es que a veces baja la música. Otro día os contaré algo sobre su Romeo particular.
Que tengáis un buen lunes.
4 Comments:
A mí Camela siempre me ha recordado a los gitanos esos que van por la calle con el teclado, tocando a todo volumen y esperando que la gente les de algunos leuros.
siiii, Mr. Celofán! Solo les falta la cabra y la gitana pasando el plato a los camela estos.
Son espantosos, pero lo mejor es que tienen una legión de fans. Suelen compaginarlo con el Regueton de las pelotas.
Esta mañana, sin ir más lejos, me ha despertado un gitano con su gitana, su organillo y su cabra. Pero no he podido enfadarme, me ha dado la risa...
todas sus putas canciones son iguales no saben cantar, ese piano asqueroso no lo sopporto i esa marikonada de letras muxo menos los odio a muerte. A mi me gusta el flamenco, pero el de verdad. Camela tiene de flamenco lo que pignoise tiene de rock
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