Antes trabajábamos igual y...

Ayer en el curro dejó de funcionar internet. En cuanto ocurrió hubo una sensación de nerviosismo y enseguida llamamos a telefónica para que lo arreglasen. Nos comentaron que ya pasarían el aviso y que ya nos llamaría el técnico que debía revisar la posible avería.

Esta mañana al llegar he comprobado si teníamos una buena noticia y no: seguíamos sin contacto con la red. Antes de ir a comer hemos quedado de acuerdo en llamar a telefónica y montar un escándalo si no venían a mirarlo. No ha hecho falta llamar porque ha aparecido un hombre que nos ha solucionado el asunto.

Y mientras él inspeccionaba los routers, usbs o como quiera que se llamen, comentábamos la dependencia que se tiene hoy en día con todos estos avances. Antes trabajábamos y vivíamos y no nos hacían falta, porque no los teníamos; ni móviles, ni ordenadores ni red de redes. A veces piensas que guay, que los avances son buenos para la humanidad; pero hay otras que opinas que quizá nos están creando demasiadas adicciones a cosas que, en realidad, tampoco son tan indispensables. La gente se comunicaba igual antes sin internet ni móviles. Prefiero un buen invento contra las guerras, que son la fuente de todo mal, antes que otro juguetito más.